La Materioteca de Galicia está trabajando en un mapa de capacidades en tecnologías y servicios relacionados con los materiales innovadores en el que se identificarán las empresas y centros de conocimiento gallegos con una labor destacada en este ámbito. Este mapa verá la luz en 2024, tal y como destacó Santiago Nieto, del equipo de la Materioteca del CIS Tecnología y Diseño, durante la apertura del workshop celebrado el 30 de noviembre.
En la primera parte de la jornada, María Gloria Álvarez, de la Plataforma de Simulación e Impresión 3D del Servicio Gallego de Salud, explicó que obtener la licencia de fabricante de productos sanitarios la medida fue determinante para la integración de sus servicios en la práctica hospitalaria y que esto supone muchos desafíos, como la certificación y la validación de estos productos.
Entre sus objetivos de investigación destacó la materialización de ideas mediante diseño digital y prototipado, además de la validación de nuevos productos sanitarios, protocolos y técnicas. En la práctica asistencial, le dan soporte a los procesos de diagnóstico y tratamiento en múltiples servicios (traumatología, oncología, odontología…), con beneficios en los tiempos de atención y en la eficiencia de costes.
Su compañero Christian Passera expuso que algunos de los materiales que usan en la impresión 3D de productos sanitarios son las resinas y los materiales termoplásticos, que presentan propiedades tan relevantes y versátiles como la flexibilidad, la biocompatibilidade y la solubilidad en agua.
Alejandro Criado, del grupo NanoSelfLab de la Universidade da Coruña, expuso que los nanomateriais de carbono son una revolución para el diagnóstico precoz de enfermedades como el cáncer o dolencias víricas que originan epidemias o pandemias.
La capacidad de estos biosensores se traduce en términos de elevada sensibilidad, rápida respuesta y alta fiabilidad. También permiten detectar neurotransmisores, lo que en un futuro hará posible a diagnosis temprana de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y la epilepsia. Al mismo tiempo, la detección de proteínas se está probando para identificar cáncer de próstata en estadios muy precoces.
La parte expositiva del workshop la cerró Bárbara Blanco, del Instituto de Materiales de la Universidad de Santiago de Compostela (iMATUS), que explicó que el uso de la bioimpresión 3D de modelos de patologías permite recrear estructuras biológicas complejas, como tejidos y órganos, usando biotintas y tintas de biomateriales.
El alto coste y la muerte de las células que se integran en estos biomodelos son algunos de los retos a superar.
Entre las aplicaciones, Blanco destacó la realización de modelos 3D de enfermedades para probar fármacos o diseñar tratamientos, por ejemplo recreando modelos de osteoartritis o de metástasis en el cáncer.
Estas tecnologías aspiran a sustituir la experimentación animal y ofrecerán más fiabilidad a la hora de probar fármacos y cribar mejor los que pasan a los ensayos clínicos con probabilidades de éxito. En el horizonte de los próximos 15 a 20 años, se prevé generar tejidos y órganos artificiales transplantables.
Nuevo estudio estratégico en la web
La segunda parte del workshop, tuvo formato de taller práctico e interactivo. Fue dinamizado por los expertos Unai Etxebarria, Iker Agirre e Izaskun Eskubi, de la empresa especializada Materially, que presentaron una selección de materiales innovadores con aplicaciones en el sector sanitario. El estudio estratégico que los recopila –y que incluye materiales creados por el iMATUS, la Universidad de Vigo y el Centro Tecnológico de Automoción de Galicia (CTAG) ya está disponible aquí.